Cuando comenzamos con el tema de la realidad aumentada, pudimos ir viendo los diferentes modos de implementarla, tecnológicamente. Recuerdo que, en un inicio, usábamos dos tipos de QR, los famosos códigos en su versión ancla y el propiamente dicho tal como se ve en la imagen.

Había una diferencia fundamental que fue modificándose y agregando posibilidades que hacían que no se vieran, o que apareciera, en lugar de los cuadraditos, la imagen que nosotros eligiéramos, que pudiéramos asociarlos a figuras más complejas, etc.

Cuando estos fueron evolucionando, se decía que ya no eran los QR o códigos ancla y se llamaba a la tecnología, realidad aumentada propiamente dicha. Lo único que había cambiado era la complejidad de los mismos, el modo en que se cargaban o visualizaban, pero era lo mismo. En este video lo explico con más detalle:

Después aparecieron los beacons o balizas que llegaban con el bluetooth y, por último, al menos hasta el momento, la aplicación que ni siquiera hay que descargar, el reconocimiento de imagen junto a la Inteligencia artificial.

Los primeros tenían el problema de la inestabilidad y los segundos problemas de distancia e interferencias con el bluetooth. También debíamos contar con la descarga de la aplicación, las compatibilidades, etc.

Pasan los años, las tecnologías evolucionan, los métodos se van actualizando con otros dispositivos y materiales, los agentes que participan se van acomodando, aumentando, intercambiando “poderes”, pero hay algo que permanece: el arte de contar, de dar sentido, de agregar valor adicional a la información “plana” que ya se tiene. Recuerden la frase: la realidad aumentada es más que una cara bonita. Y por ese camino seguimos.

El Museo Hirshhorn es el museo nacional de arte moderno y contemporáneo y una voz líder para el arte y la cultura del siglo XXI. Forma parte del Smithsonian y se encuentra en Washington, DC Con casi 12.000 pinturas, esculturas, fotografías, instalaciones, etc. Sus propiedades abarcan una de las colecciones más importantes de arte americano y europeo de posguerra en el mundo. El Hirshhorn presenta diversas exhibiciones.

Hirshhorn Eye (Hi, Hola) es una especie de audioguía que utiliza el reconocimiento de imagen y el machine-learning, gracias a Linked by Air technology. Uno se para frente a la obra de arte con su celular, éste escanea la obra en tiempo real e, instantáneamente esta acción desbloquea videos con las voces de los artistas y con información curada y exclusiva.

«El arte contemporáneo es a menudo desafiante», dijo la directora del Hirshhorn, Melissa Chiu. «Al crear un producto instantáneo, muy fácil de usar, como Hi, se logra que la gente tenga un acceso a una obra de arte que, habitualmente, sienten que no entienden, de una manera más sencilla, (cotidiana, natural). Ofrece otra manera de hacerlo».

Es evidente que nos encontramos con una intención muy de nuestra época en la que, por suerte, se piensa con prioridad en la experiencia del usuario, la interacción y el diseño visual, desarrollando productos digitales que ponen a los mismos en primer lugar.

Los artistas hablan desde sus casa o estudios. Una charla cara a cara con, por ejemplo, Olafur Eliasson, Jeff Koons, Damien Hirst, Lorna Simpson y muchos más. Muchas veces me pregunté qué estaría pensando Yayoi Kusama con tanto puntito en su cabeza. Y muchas veces he comentado que, justamente, esa info contextual era una de las cosas interesantes que la realidad aumentada nos podía facilitar.

«Creo que los teléfonos móviles se han convertido en una extensión de la vida de las personas y que sería ingenuo suponer que las personas no tienen sus teléfonos cuando van a museos», dijo Chiu. «Si lo aceptas como línea de base, entonces tienes que decir: ¿cómo puede la tecnología ayudar a las personas a tener una experiencia más dinámica o atrapante o más profunda de lo que podrían haber tenido de otra manera». (…) «El Hirshhorn Eye realmente trata de ofrecer una experiencia más directa con el objeto de arte y el propio artista».

Cualquiera puede acceder a Hi yendo yendo a la dirección correspondiente. Obviamente, tenés que estar en el museo… Nada de ubicuidad, en este caso.

Para garantizar que el arte sea accesible, todos los videos de Hi vienen con descripciones visuales para los visitantes con problemas de visión y subtítulos para personas con problemas de audición.

Hirshhorn Eye ofrece:
Una conexión instantánea con los artistas detrás del arte a la vista, explorando el «cómo» y el «por qué» del arte contemporáneo.
Más de 150 piezas de contenido exclusivo, incluyendo video, audio e información privilegiada sobre casi 50 obras de arte e instalaciones, desde «Pumpkin» de Yayoi Kusama hasta «Pickett’s Charge» de Mark Bradford.

Todo el tercer piso del museo está «activado» con paradas adicionales en el nivel inferior, lobby y Plaza al aire libre.

Los artistas destacados incluyen: Ed Atkins, José Bedia, Mark Bradford, Olafur Eliasson, Damien Hirst, Nancy Kienholz, Jeff Koons, Joseph Kosuth, Yayoi Kusama, Annette Lemieux, Tony Lewis, Reynier Leyva Novo, Glenn Ligon, Inge Mahn, Teresa Margolles, Charles Simonds, Lorna Simpson, Hiroshi Sugimoto, Siebren Versteeg, Didier Vermeiren, Huang Yong Ping.

Trabajaron en el proyecto, como decíamos Linked by Air (desarrollo), Antenna International (contenido) y Captain y Fox (videos). Hi está (cargado) con más de 800 imágenes, lo que le permite reconocer instantáneamente cualquier obra de arte desde cualquier ángulo, incluso en instalaciones complejas y escultura multimedia.

Habrá que viajar y ver si funciona tan bien, si reconoce algo, si carga la página…. los detallitos de siempre.