El miércoles 16 de octubre, en el marco de las III Jornadas de Intercambio Docente, tituladas “Cuál es la relación adecuada entre Tecnología y Pedagogía”, fui convocada por la Directora de la Escuela de Tecnología de la UNNOBA, Universidad Nacional del Noroeste de Buenos Aires, (sede Junín),  Claudia Russo, para dar una charla.

Lo primero a destacar fue el recorrido que me hizo Claudia por los diferentes establecimientos de la Universidad. Quedé impactada por las posibilidades edilicias y educativas que la universidad ofrece. Fue muy interesante charlar sobre la población que allí estudia, la llegada de alumnos del exterior, el futuro del establecimiento y los miles de proyectos que tienen en mente.

En cuanto a mi intervención, la cosa fue sorpresivamente muy acogedora. No porque no esperara un lindo recibimiento, sino porque estaba preparada para una cosa y me encontré con otra completamente diferente. Para mejor, indudablemente.

Yo esperaba encontrarme con alumnos de las carreras de económicas y jurídicas y me encontré con docentes de Informática. La Universidad cuenta con estas tres escuelas y no sé por qué pensé lo que pensé. Pero así fue.

Este cambio en mi cabeza fue muy interesante porque nos permitió reflexionar sobre temas que en ninguna otra ocasión se me habían planteado. Los públicos a los que estamos habituados, en general, son semejantes: docentes o alumnos de distintas asignaturas, que están luchando los primeros por aprender a encender una computadora y los segundos por ser campeones de Minecraft.

Esta vez, los alumnos eran diferentes. De repente, me sentí rodeada de una especie de “nativos digitales” mayores. ¿Qué quiero decir con esto? Que los docentes que allí estaban tenían casi las mismas capacidades, inconvenientes, problemas, dudas, etc. que los nativos digitales, entendiendo por éstos (rápido y cortito) a jóvenes que han nacido en época tecnológica y que ya vienen de manera “innata” con ciertos conocimientos sobre cómo manejar la tecnología.

Los profesores que aquí estaban eran, de algún modo, digitales porque trabajan diariamente con la tecnología, con las computadoras, con las plataformas, los sistemas, los programas de informática, pero…y aquí viene el mismo pero que usamos con los jóvenes, pero no saben cómo usar todo este saber pedagógicamente, estratégicamente, “útilmente”.

Esto implicó una gran frescura y una enorme renovación en la rueda de preguntas. Estos docentes tienen, si se quiere, un punto a favor, una capacidad en la cual ya no tienen que capacitarse (aunque suene reiterativa… ¡igual que los nativos digitales!), pero están en el mismo escalón a nivel estratégico, que los demás docentes.

Necesitan aprender estrategias, métodos para implementar ese saber en actividades del aula, en la actividad docente diaria. Necesitan actualizarse, conocer tendencias, implementar novedades para amenizar el aprendizaje cotidiano.

Fue en ese momento en que pudimos ahondar, no en cómo se utilizan las compu, los programas, las aplicaciones, etc. sino en aprender nuevas “técnicas” que estimulan a este moderno  estudiante con características de prosumer.

Para mí la experiencia fue definitivamente enriquecedora porque se termina con otro mito: los docentes de informática y tecnología también tienen «problemitas»…

Les adjunto el pdf. de la presentación total Panorama TIC